Vaselina filante de alta densidad para apicultura, ideal para monitorizar varroa en fondos sanitarios, trampas para Aethina tumida y barreras contra hormigas, con gran estabilidad y adhesión.
Si llevas tiempo controlando varroa, sabes que el diagnóstico serio empieza en el fondo sanitario. Y también sabes lo frustrante que es usar productos que se escurren, se derriten o dejan a los ácaros “flotando” de un lado a otro de la bandeja. Si quieres conteos fiables y mapas reales de cómo está el parasitismo en la cámara de cría, necesitas una vaselina que se quede quieta donde la pones.
Esta vaselina filante es una vaselina de alta densidad, muy adhesiva y estable, especialmente indicada para monitorización de varroa y uso en trampas apícolas. A diferencia de la vaselina líquida, aquí lo que buscamos no es que fluya, sino lo contrario: que permanezca fija en la bandeja durante semanas, sin escurrir aunque la colmena tenga algo de inclinación o sufra cambios de temperatura moderados.
Su uso estrella es claro:
• Monitorización de varroa: extendida en capa fina sobre la bandeja del fondo sanitario, retiene los ácaros justo en el punto de caída. Esto permite conteos diarios o semanales fiables y, si marcas la bandeja por cuadrantes, evaluar la distribución del parasitismo en el nido de cría (más carga en un lado, zona central, extremo frío, etc.). Aquí la filante gana por goleada a cualquier vaselina fluida.
En el día a día del apiario también funciona muy bien como aliada en el control de plagas:
• Trampas para Aethina tumida: aplicada en bandejas trampa tipo Beetleblaster o diseños similares, atrapa los escarabajos que caen o se refugian en ranuras y recovecos.
• Barrera contra hormigas: en patas de soportes y caballetes, crea una película pegajosa y duradera. Al ser más densa que la vaselina líquida, aguanta semanas sin escurrir, especialmente útil en zonas con hormiga argentina u otras plagas persistentes.
• Trampas para vespa velutina: en algunos modelos de trampas selectivas, se aplica en zonas de acceso o retorno para dificultar el escape de las avispas que entran, mejorando la eficacia del diseño.
Además, es una gran aliada para el mantenimiento del material:
• Protección de roscas y cierres: aplicada en filetes metálicos, cierres de tapas, grifos de maduradores y otros puntos de unión, ayuda a evitar oxidación y que el propóleos “suede” las piezas. Facilita el desmontaje periódico para limpieza o inspección.
• Juntas de ahumadores: sobre juntas de goma o cuero del fuelle, mejora el sellado y prolonga la vida útil, evitando que se resequen y agrieten.
• Sellado temporal: útil para tapar pequeñas grietas o huecos en la colmena a la espera de una reparación definitiva. Las abejas no tienden a propolizarla encima, así que puedes corregir más adelante sin dejar “parches eternos”.
Se presenta en formato de 1 kg, pensado para apicultores que hacen un seguimiento sistemático de varroa y utilizan fondos sanitarios y trampas de forma regular. Con ese peso tienes producto de sobra para preparar varias bandejas, trampas y puntos de protección en diversos apiarios durante toda la campaña.
Uso recomendado en apicultura como barrera física y producto de captura. No está diseñada para consumo ni aplicaciones internas, y debe aplicarse siempre en capas finas y homogéneas con ayuda de espátula, guante o pincel según el uso.
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