Caja de cartón de doble canal para polen

Cuando trabajas con polen, aprendes rápido que una caja normal no sirve. Los 25 kg de granulado necesitan un envase que aguante el peso sin ceder y que proteja la calidad del producto durante el transporte y el almacenamiento. Por eso este formato de caja de cartón doble canal para 25 kg es el que verás en cualquier planta de secado o exportador serio.

La función principal es estructural: la rigidez del doble corrugado evita que la caja se aplaste cuando apilas palets completos. Esa resistencia es la que mantiene la granulometría del polen intacta, sin que los gránulos se rompan y se conviertan en polvo, algo muy penalizado en el mercado.

A nivel de conservación, esta caja no va sola. Está diseñada para usarse con una bolsa alimentaria interior (se vende por separado), que es la verdadera barrera frente a humedad, fermentaciones y oxidación. La caja actúa como escudo mecánico: si hay golpes en el transporte o movimientos bruscos, evita que la bolsa se perfore.

También aporta opacidad total, algo esencial para evitar la degradación por luz UV y conservar ese color vivo del polen bien secado: amarillos de romero, naranjas de brezo, tonos oscuros de eucalipto.

En logística es un estándar por una razón simple: 40 cajas de 25 kg hacen una tonelada exacta, perfecto para fletes internacionales y paletizado europeo. El rotulado multilingüe facilita la exportación sin re-etiquetar.

En resumen: es la caja que protege tu polen de verdad. Pensada para soportar peso, mantener el granulado entero y trabajar junto a una bolsa interior alimentaria para garantizar la calidad desde el secadero hasta el cliente final.